viernes, 25 de enero de 2008

LUNA DE MI EXILIO, de Clara Luz Muñiz

El primer poemario de esta joven poeta que ahora vive en Mendoza y participó de la revista La rosa de cobre es un conjunto de poemas super breves, escritos como "diálogo", si se quiere y es posible, entre ella y Oscar Navarro por mensajes de texto. A primera vista el diseño es muy cuidado. A segunda vista los poemas son breves y eso nos podría recordar a Pizarnik, aunque creo que la cercanía es a nivel formal y no de contenido. Al menos en estos versos no está el germen de una mentalidad suicida. Eso espero.

También espero que el esfuerzo de Clara de sus frutos, merecidos. Y contribuyo con un pequeño granito de arena al hablar de Luna de mi exilio, un libro que será presentado al público en las próximas semanas.

SIN CITY, de Robert Rodríguez

Lindísima película, si la vemos desde el punto de vista estético. Pero yo me he ensañado con ella por la violencia que muestra, por el sadismo, por buscar la impresión fácil y porque es una película que atenta contra contra el mundo que yo quiero. ¿Cuál es el problema? Que a la violencia se le opone más violencia, pareciera que no hay solución sin ella, y los medios influyen en el comportamiento de la gente. Recordemos lo sucedido con la publicación del cuento de Poe sobre Valdemar, o la transmisión radial de La guerra de los mundos. Una persona que carezca del criterio necesario puede creer que esa es la forma adecuada de actuar y ciertamente así sucede en los países desarrollados, países en los que un loco-producto-de-las-políticas-violentas sale a la calle con un arma a "cazar gente" (ver el caso de James Oliver Huberty, en plena época Reagan).

El monopolio de la industria del cine holliwoodense tiene su mayor impacto a nivel cultural, pues esa idiosincracia de garrote y puñal se propaga hacia el Sur como las pelusas de un panadero.

Entiendo que la película represente el caos actual, pero no ayuda porque no hay juicio de valor respecto de cómo actúan los personajes. Y capítulo aparte es para el sadismo, porque hay otras películas violentas como Ciudad de Dios, pero ella muestra un camino no violento para la consecución de un fin y no hay sadismo como el de Marvin que corta un cuerpo vivo y lo da a comer a un lobo hambriento, o Bruce Willis disparando en las bolas a un violador pedófilo en vez de matarlo directamente como hubiera sido más fácil y ético. Un intento de prolongar el dolor ajeno.

Por favor, amigos, no vean esta publicidad norteamericana.

miércoles, 9 de enero de 2008

MENSAJES DE LA TIERRA, de Sandra Amaya

El mejor regalo que recibí esta Navidad fue el disco que voy a comentar. Llenas de amor y poesía, las canciones de Sandra Amaya me muestran un mundo extraordinario. Siempre que me vuelo con un disco lo escucho hasta el hartazgo, y este parece no acabar más porque las canciones son redescubiertas en cada reproducción. Se los recomiendo.

Sandra Amaya tiene una voz particularísima y, como les decía, su poesía es muy buena. Habla sobre los niños, sobre las mujeres que sufren. Pero quien habla con esa voz, está denunciando las causas de ese sufrimiento.

sábado, 5 de enero de 2008

SOSTIENE PEREIRA, de Antonio Tabucchi

Una película y un libro excelentes. Estos días en Potrerillos me los pasé con Sasturain y Tabucchi, leyendo historias negras y odiando a las fuerzas del poder y quienes lo detentan.
Atrapante desde todo punto de vista, la redacción a l manera de un informe policial, el remordimiento de Pereira, las vida de Monteiro y Marta, todo me atrapó. Y me dejé atrapar. Y ahora quiero escribir un trabajo sobre eso.
Sostiene Pereira habla sobre el arrepentimiento de un hombre moderado. Nos dicen los semiólogos que la narrativa es la historia de un cambio, wendepunkt, y en este caso el cambio es el yo hegemónico de la confederación de almas que viven en Pereira.

LA LUCHA CONTINÚA, de Juan Sasturain

Un libro nuevito, de noviembre del 2007. Una historia complejísima que necesita de un raccoto final para entender lo que ni siquiera el protagonista pudo entender. Dentro de la tradición de la novela policial, pero con un tono jocoso constante a lo largo de las más de trescientas páginas. Me llama la atención que mezcle lo policial con lo humorístico y más aún que añada toques de ciencia ficción. Definitivamente un libro recomendable para lectores veraniegos y coleccionistas.

Otro tema es el histórico, pues las alusiones al bochorno menemista y el tráfico de armas y de drogas está presente y rige los hilos la historia. Con esto, el humor toma otro matiz. Y la ciencia ficción quizás no se tal, o al menos deja de ser relevante.